No todos los días nos compramos un coche nuevo. Por eso, cuando llega el momento, es mejor no apresurarse para asegurarnos de que estamos tomando la mejor decisión. Como puedes presuponer, existen muchos factores a considerar, ahora nos centraremos en los más importantes.
Cinco aspectos a considerar antes de comprar el coche
Comprar un coche que satisfaga tus exigencias y ahorrar unos cuantos miles de euros no es una misión imposible. En realidad el secreto está en saber exactamente lo que quieres y tomarse un tiempo para buscar las mejores opciones que se encuentran en el mercado.
- Establece cuánto estás dispuesto a pagar por un coche. Te asombraría saber cuántas personas acuden al concesionario con un modelo en mente y terminan comprando otro, casi siempre pagando un precio que se encuentra muy por encima de sus posibilidades. Lo importante es que mantengas en mente tus necesidades reales. ¿Por qué pagar por más potencia o espacio cuando realmente no lo necesitas?
- Determina si necesitas obligatoriamente un coche nuevo o es suficiente con un modelo de segunda mano. En la actualidad, debido a la crisis económica, los precios de los coches usados han bajado mucho y es posible encontrar verdaderas gangas. Si compras un coche de segunda mano en un concesionario, tendrás un año de garantía y si cierras el contrato directamente con un particular, la ley establece que tienes hasta seis meses para detectar los” vicios ocultos” y demandar al propietario. Además, en los últimos meses los bancos también están realizando subastas de coches con precios muy tentadores.
- Infórmate sobre las diferentes ayudas que existen para comprar un coche. Por ejemplo, el estado brinda incentivos para quienes compren modelos eléctricos o entreguen un coche de más de diez años. Algunos concesionarios igualan esta ayuda y otros incluso la duplican. Si buscas con atención podrás ahorrarte unos cuantos miles de euros.
- No te cierres a las alternativas menos convencionales. Por ejemplo, el leasing es una opción muy interesante ya que al final el coche será tuyo pero no tendrás que pagarlo de una sola vez sino mediante una serie de cuotas anuales, como si lo estuvieras alquilando. Después de dos años podrás devolverlo, pagar el valor residual o renovar el contrato pactando cuotas menores. Otra alternativa que no debes desechar a la primera es el renting. En este caso se suele hacer un contrato especial de alquiler que se extiende por 3 ó 5 años con precios muy convenientes. Terminado este periodo el coche no será tuyo pero puedes renovar el contrato y cambiarlo por un modelo nuevo. Lo positivo es que no tendrás que preocuparte por el seguro de coche y, si usas el vehículo con fines comerciales, podrás deducir del IRPF el 100% de las cuotas.
- Ten en cuenta todos los gastos ocultos que vienen asociados al coche. No es la primera vez que alguien se compra un modelo de lujo y después no puede mantenerlo. En este caso, considera cuánto consume, cuánto cuestan las principales piezas de repuesto y cuánto deberás pagar anualmente por concepto de impuestos de circulación y seguro de coche, puedes calcular tus seguros de coches en Génesis y conformarte una idea general de la cuantía total.