Velocidad y Aceleración Vs. Consumo de Gasolina
La crisis económica se ha hecho sentir en cada hogar por lo que muchas familias se han visto obligadas a revisar su consumo y cambiar algunos hábitos de vida. A esto se le suma que en los últimos meses el precio del combustible ha aumentado; desde el 2010 hasta la fecha se ha incrementado en un 20%. Por eso no es extraño que ahorrar gasolina se haya convertido en una necesidad de primer orden, sobre todo para quienes deben recorrer varios kilómetros al día.
Nuestra compañía de seguros no se mantiene ajena a esta realidad y por eso no solo te brindamos seguros de coche en Génesis sino que también te explicamos cómo ahorrar gasolina, simplemente cambiando la forma de conducir.
Aclarando conceptos
La aceleración y la velocidad inciden en la cantidad de combustible que consume un coche. De hecho, en el imaginario popular se ha instaurado la idea de que cuando se disminuye la velocidad de un vehículo con un motor a combustión, se reduce instantáneamente la cantidad de carburante que se consume. Esta idea es cierta pero existen algunos casos en los que no se aplica.
En primer lugar debemos tener presente que velocidad y aceleración son dos conceptos diferentes. La velocidad indica la distancia que recorre el coche en dependencia del tiempo mientras que la aceleración es la diferencia en el tiempo entre dos velocidades diferentes.
En realidad, el consumo de combustible no depende directamente de la disminución de la velocidad puesto que no existe una relación completamente lineal. Por ejemplo, la resistencia aerodinámica de un coche es proporcional a la velocidad con la cual este se mueve. Esto significa que los coches de diseño alto, como los todoterreno, los SUV o los monovolumen consumirán más combustible que sus homólogos de formas aerodinámicas.
Esta correlación también nos indica que se consumirá mucho combustible conduciendo a 120 km/h pero que el consumo disminuirá al levantar el pie del acelerador. Sin embargo, esta es una regla que se puede aplicar solo a las velocidades más altas.
La aceleración y el número de revoluciones del motor
Cuando se hace referencia a velocidades que oscilan entre los 50 y los 70 km/h, el gasto de combustible dependerá esencialmente del peso del coche, la aceleración y el número de revoluciones del motor. Cuando se circula a poca velocidad (menos de 40 km/h) el consumo de combustible vuelve a aumentar si dejamos una marcha muy corta que obliga al motor a mantener un elevado número de revoluciones.
Debes saber que el motor posee un rango ideal de revoluciones, de esta forma realiza un esfuerzo mínimo y optimiza el uso del combustible. Si mantenemos el motor muy por debajo del rango ideal, este no tendría la fuerza necesaria para mover el coche y consumirá más combustible. Podrás notarlo porque suele emitir un sonido más grave debido a las vueltas que debe realizar.
Si te acostumbras a conducir a una velocidad que oscila entre los 70 y 90 km/h, con una marcha que mantenga el número de revoluciones alrededor de 3.000 y sin pisar a fondo el acelerador, podrás tener un ahorro de hasta 500 euros al año, una suma que será más que suficiente para contratar los seguros de coche a todo riesgo.
