Tendedero eléctrico o secadora ¿Cuál es más conveniente?

¿Tienes problemas para secar la ropa en casa? Te explicamos los pros y los contras de las secadoras y tendederos eléctricos, para que puedas elegir la opción más conveniente.

Si vives en un piso o en una zona donde el invierno es largo y frío, es probable que secar la ropa se convierta en un pequeño dolor de cabeza cotidiano. Cuando hace mal tiempo y es imposible tender la ropa fuera o incluso abrir la ventana para que se seque con el viento, no es extraño que esta termine acumulándose, generando humedad dentro de casa.

Tendedores eléctricos: Una solución ventajosa para secar la ropa

Las secadoras son la opción más común para secar la ropa en casa, pero también podrías apostar por un tendedero eléctrico, una alternativa menos conocida pero que aporta más ventajas. Los tendederos eléctricos son similares a los tradicionales, pero a diferencia de estos, tienen un calefactor incorporado, el cual da calor a las barras donde se tiende la ropa. Estos modelos no generan tanto calor como una estufa, pero es suficiente para que la ropa se seque rápidamente.

Las ventajas de los tendederos eléctricos

1. Precio más bajo. Comprar una secadora de una calidad aceptable suele suponer el desembolso de algunos cientos de euros. Si quieres comprar un modelo de bajo consumo para ahorrar en la factura de la luz, su precio será aún mayor. Un tendedero eléctrico te saldrá mucho más barato ya que su precio oscila entre los 50 y 100 euros, según su tamaño y calidad, lo cual significa que es mucho más económico que una secadora.
2. Consume menos electricidad. Uno de los principales problemas que representan las secadoras es el elevado consumo de electricidad. Como media, una secadora consume entre 1 600 y 2 500 vatios. Un tendedero eléctrico, al contrario, consume apenas unos 100 vatios, por lo que notarás la diferencia en tu factura de la luz.
3. Seca antes la ropa. Aunque el tendedero consume menos electricidad que la secadora, no significa que sea menos eficaz. De hecho, a diferencia de esta, que suele tardar bastante en secar la ropa, con un tendedero eléctrico el secado es más rápido, de manera que podrás ahorrar tiempo.
4. Ocupa menos espacio. Si tienes un piso pequeño, uno de los principales problemas para instalar una secadora es el espacio, sobre todo porque esta necesita estar conectada al sistema para el desagüe. Una de las principales ventajas del tendedero eléctrico es que ocupa menos espacio que una secadora ya que cuando no lo uses, lo puedes plegar y guardar. Hay tendederos horizontales especialmente diseñados para ganar espacio que tienen hasta 30 barras, otros incluso se pueden instalar en el techo.
5. Protege más la ropa. A diferencia de la secadora, que puede dañar la ropa y encogerla debido al proceso de centrifugado, el tendedero eléctrico no causa estos problemas, de manera que tu ropa se mantendrá en buen estado durante más tiempo. Eso también significa que podrás secar todo tipo de prendas, al contrario de la secadora, donde no se recomienda colocar ropa delicada y de lana.