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Dic 2014 

Siete consejos para ahorrar energía en casa

¿Sabías que el usuario medio paga un 75% más por su factura de la luz que hace diez años? De hecho, en los últimos meses hemos sido testigos del enésimo cambio, esta vez en la forma de calcular el precio de la electricidad. Como resultado, la mayoría de los consumidores que están acogidos al PVPC no podrán saber con antelación cuánto pagarán aproximadamente por su consumo ya que el precio del kilovatio cambia día tras día e incluso de una hora a otra. Ante esta perspectiva, ahorrar energía es cada vez más importante.

¿Cómo ahorrar electricidad?

  1. Apaga los electrodomésticos en stand-by. Cuando los equipos están en stand-by no están completamente apagados, lo cual significa que continúan consumiendo electricidad. De hecho, desarrollar el hábito de apagar el televisor, los ordenadores o el equipo de música puede representar un ahorro del 10% en la factura de la luz.
  2. Presta atención a la temperatura de los electrodomésticos. La lavadora y el lavavajillas son unos de los equipos que más consumen en casa. Sin embargo, si los utilizas a bajas temperaturas podrás ahorrar ya que el consumo se dispara solo cuando se debe calentar el agua. Por ejemplo, utilizar la lavadora con una temperatura de entre 40ºC y 60ºC implica un ahorro del 40%. También puedes ahorrar manteniendo el calentador de agua a 40º C, así evitas calentar demasiado el agua para luego tener que enfriarla.
  3. Mantén bajo control la calefacción. ¿Sabías que cada grado de temperatura que aumentas supone un incremento del 7% en el consumo? Es recomendable que por la noche y cuando estés fuera de casa mantengas una temperatura que oscile entre los 15ºC y 17ºC, durante el día y la tarde, cuando estés en casa, puedes aumentar a 19ºC o 21ºC. Además, considera que el mantenimiento es fundamental, por ejemplo, un radiador con aire dentro dificulta la transmisión del calor. Por eso, si realizas el mantenimiento de todo el sistema una vez al año, podrás ahorrar hasta un 15%.
  4. Mejora el aislamiento de la casa. En invierno aproximadamente la mitad del consumo energético se debe a la calefacción y en verano se trata del aire acondicionado. En ambos casos, mejorar el aislamiento de las habitaciones impedirá que haya fugas, lo cual se traduce en un gran ahorro. En ocasiones ni siquiera es necesario hacer una gran inversión sino tan solo encontrar las rendijas de puertas y ventanas y colocar burletes.
  5. Cierra siempre la puerta del refrigerador. La costumbre de dejar la puerta del frigorífico abierta representa un gasto de energía, aproximadamente un 5% más de lo habitual. Por tanto, cada vez que abras la puerta, cerciórate de cerrarla lo más rápido posible. También se recomienda que descongeles los alimentos dentro de la nevera, no solo se trata de un hábito más saludable sino que también aprovecharás la energía que estos liberan.
  6. Cocina de manera inteligente. En la cocina puedes poner en práctica pequeños trucos que te permitirán ahorrar. Por ejemplo, cocinar con una olla a presión puede suponer un ahorro del 50% de energía, aunque el simple hecho de tapar ollas y sartenes ya representa un ahorro del 25%. Si tienes placas de inducción, puedes apagarlas cinco minutos antes, el calor restante suele ser suficiente para terminar la cocción.
  7. Utiliza solo las luces necesarias. ¿Sabías que las bombillas de bajo consumo no solo duran ocho veces más sino que también representan un ahorro del 80%? Además de cambiar las bombillas de casa, recuerda mantener apagadas todas las luces que no necesites, sobre todo las luces indirectas, que consumen mucho pero no tienen demasiada potencia.
Fuente:
Carcar, S. (2012, Junio) El recibo de la luz sube más del 70% en seis años sin poner freno al déficit. En: El País.