Seguros para deportes de riesgo ¿qué cubren?

¿Practicas deportes de riesgo? Descubre qué ventajas pueden aportarte los seguros para deportes de riesgo y por qué deberías contratar uno antes de tu siguiente aventura.

Los deportes de riesgo ocasionan muchos accidentes cada año. ¿Sabías que 1 de cada 60 personas que realiza un salto base muere y que cada año fallecen unas 40 personas practicando alpinismo? También son una causa habitual de discapacidad y problemas crónicos de salud. La buena noticia es que existen seguros que cubren los riesgos de la práctica de un deporte de riesgo para que puedas disfrutar de la aventura con más tranquilidad.

¿Por qué deberías contratar un seguro para deportes de riesgo?

Ya practiques surf, paracaidismo, rafting, alpinismo o parapente, contratar un seguro para deporte de riesgo no evitará que sufras un accidente, pero te cubrirá las espaldas en caso de que se produzca un imprevisto. Además de que en muchos destinos es obligatorio contar con un seguro para practicar deportes de riesgo, contratar este tipo de póliza te ayudará a gestionar de forma rápida y sencilla cualquier eventualidad, a la vez que te ahorrará costes si sufres un accidente. Y en caso de fallecimiento, le facilitará los trámites a tu familia.

Las principales coberturas que ofrecen los seguros para deportes de riesgo

Antes de contratar un seguro, debes comprobar que cubre el deporte que practicas pues no todas las aseguradoras incluyen los mismos deportes de riesgo. También es importante que revises las condiciones de la póliza ya que suelen variar de un seguro a otro. En cualquier caso, la mayoría de los seguros para deportes de riesgo suelen incluir las siguientes coberturas:

1. Asistencia médica por enfermedad o accidente. Si debido a un accidente o enfermedad necesitas atención médica en tu destino, la mayoría de los seguros para deportes de riesgo se responsabilizan de todos o gran parte de los gastos médicos. Desde la consulta médica, intervención quirúrgica y hospitalización hasta las pruebas diagnósticas y medicamentos, no tendrás que preocuparte por nada. Algunas aseguradoras cubren incluso la rehabilitación tras un accidente ya que, a diferencia de los seguros de viaje tradicionales, estas pólizas tienen un límite de gasto mayor.
2. Búsqueda y rescate. Si practicando un deporte de riesgo te pierdes o sufres un accidente que te impida regresar por tus propios pies al punto de partida, el seguro suele correr con los gastos derivados de tu localización y salvamento. En este caso, la mayoría de pólizas para deportes de riesgo cuentan con coberturas que incluyen el coste del medio de transporte más conveniente para cada tipo de salvamento, así como los gastos derivados de los servicios de rescate y la atención médica de urgencia.
3. Repatriación y transporte sanitario. Con un seguro para deportes de riesgo tienes garantizado el regreso a casa en caso de accidente o enfermedad. Por lo general, la aseguradora organiza y costea el traslado desde tu destino a tu domicilio o al centro hospitalario más adecuado. A diferencia de los seguros de viaje tradicionales, este tipo de póliza tiene límites más elevados para afrontar estas situaciones, por lo que es probable que no tengas que desembolsar nada.
4. Indemnización por pérdida de material deportivo. Ya viajes con tu tabla de surf o tu equipo de esquí, un seguro para deporte de riesgo cubrirá su pérdida o daño. Muchas aseguradoras garantizan la localización y posterior envío del material deportivo, sin coste añadido y, si se ha perdido o dañado te pagará el importe correspondiente al valor del equipaje. En caso de retraso en la entrega del material, algunas compañías corren con los gastos por el alquiler o compra de nuevo material.
5. Pérdida de servicios contratados. Si por accidente, enfermedad o cierre del centro deportivo no puedes cumplir la planificación prevista durante tu viaje, algunas aseguradoras te reembolsarán los gastos correspondientes a los servicios que tuvieses contratados. Esto también se aplica para las clases o cursos de entrenamiento que hubieses pagado. Algunas aseguradoras también te devolverán este importe en caso de que no puedas viajar por circunstancias de fuerza mayor.