Reparar pinchazos en el coche
¿Cómo arreglar un pinchazo en el coche? Descubre las principales causas de los pinchazos y qué puedes hacer en cada caso.
Ningún conductor se libra de los pinchazos. En algún momento encontrarás en tu camino un tornillo o un clavo, una piedra afilada o cualquier otro objeto que provoque un pinchazo en la rueda de tu coche. Por esa razón, la Dirección General de Tráfico obliga a los conductores a llevar en el coche una rueda de repuesto o un kit repara pinchazos. Así podrás arreglar el pinchazo del coche rápidamente y retomar la marcha de manera segura.
¿Qué debes hacer si has pinchado un neumático?
Si has sufrido un pinchazo, es probable que se deba a que un objeto punzante ha traspasado la banda de rodadura generando una fuga de aire. Si tienes suerte, ese objeto puede actuar como “tapón”, por lo que el aire se escapará lentamente y podría darte tiempo a llegar hasta el taller más cercano.
Otra solución es recurrir al kit repara pinchazos que muchos fabricantes incluyen en los coches y que sirve para sellar temporalmente el orificio. Si tienes un kit manual, debes conectar la cánula del bote a la válvula del neumático y vaciar su contenido dentro de la rueda. Luego tendrás que retirar la cánula de la válvula e inflar la rueda usando el compresor.
Si el kit antipinchazos es automático, debes conectar el bote sellante al compresor de aire y el tubo del compresor a la válvula de la rueda. Cuando lo actives, el compresor introducirá la espuma junto al aire hasta alcanzar la presión correcta del neumático. Sin embargo, este tipo de reparación de pinchazos solo se recomienda para los agujeros pequeños, de menos de 3mm.
De hecho, los pinchazos también pueden producirse por un bordillazo en un flanco o debido al sobrecalentamiento por exceso de velocidad, presión de aire insuficiente o unos neumáticos en mal estado. En esos casos la rueda suele perder el aire bastante rápido, por lo que tendrás que reducir lentamente la velocidad y detenerte cuanto antes.
Es probable que el kit para reparar pinchazos del coche no sea suficiente, por lo que tendrás que recurrir a la rueda de repuesto. Si tienes la típica rueda de galleta, recuerda que su distancia de uso oscila entre 100 y 200 kilómetros y no podrás circular a más de 80 km/h. Obviamente, debes tener a mano un gato para elevar el coche y una llave para aflojar y apretar los tornillos de la rueda.
Otra alternativa consiste en contactar a tu aseguradora. Con los seguros de coche de Génesis tendrás las espaldas cubiertas. Si tu vehículo queda inmovilizado a causa de un accidente o una avería, como un pinchazo, error al repostar, falta de combustible o simplemente porque has olvidado las llaves dentro, ponemos a tu disposición un servicio de ayuda mecánica de emergencia para que puedas continuar tu viaje.
Y si por algún motivo no se puede arreglar el pinchazo del coche in situ, nos encargaremos de trasladarlo hasta el concesionario oficial de la marca más cercano o el que tú elijas, siempre que se encuentre en un radio de 100 kilómetros. Además, ofrecemos ese servicio desde el kilómetro cero, de manera que no tendrás que volver a preocuparte por la reparación de pinchazos.
