NutriScore ¿Conoces el nuevo etiquetado de los alimentos?

Colocar un semáforo nutricional a los alimentos puede ayudarnos a elegir opciones más saludables. Te explicamos en qué consiste el NutriScore y cómo utilizarlo inteligentemente.

Somos lo que comemos, dijo hace siglos el filósofo alemán Ludwig Feuerbach. Hoy la ciencia demuestra que una alimentación saludable puede mejorar nuestra calidad de vida y prevenir numerosas enfermedades. Para asegurarnos de que comemos de manera sana, es fundamental comprender el etiquetado de los alimentos, por lo que muy pronto se pondrá en marcha el NutriScore, un código que los fabricantes usan con éxito en Francia desde hace más de un año.

El NutriScore puede mejorar en un 9,3% la calidad de los alimentos que consumimos

En los próximos meses, el Ministerio de Sanidad implantará un sistema de clasificación de los alimentos por colores. El código se encontrará en la parte frontal del producto para ayudar a los consumidores a tomar decisiones rápidas respecto a la calidad de ese alimento, sin tener que detenerse a leer la letra pequeña.

El objetivo es que los consumidores elijan productos más saludables que ayuden a mantener bajo control problemas como la obesidad, la diabetes y las enfermedades cardiovasculares. De hecho, un estudio realizado en colaboración entre Francia y España reveló que el NutriScore puede mejorar la calidad de los alimentos que elegimos en un 9,3%.

¿Qué representan los colores del semáforo nutricional?

Nutri-Score clasifica los productos en cinco colores, que llevan letras asociadas. En sentido general, los alimentos etiquetados con color verde son los más saludables y los de color rojo los más dañinos. El color amarillo, identificado con la letra C, se encontraría en el punto central del gráfico, por lo que indicaría alimentos de calidad nutricional media.

Los colores y las letras se asignan a cada alimento según un algoritmo que atribuye puntos en dependencia de la composición nutricional de 100 gramos de producto. Con este modelo, los alimentos ricos en azúcares simples, ácidos grasos saturados y sal se considerarían menos saludables, por lo que irían marcados con el color naranja o rojo y las letras D o E.

Por ejemplo, un alimento que contenga menos de 9 gramos de azúcar por cada 100 gramos de producto se consideraría más saludable y recibiría una puntuación baja que lo posicione cerca del verde. Un alimento con mucha azúcar recibiría una puntuación alta que lo acercaría al rojo. Lo mismo se aplica para las grasas saturadas y la sal. Como resultado, se podrá diferenciar de un vistazo aquellos alimentos que tienen muy poco valor nutricional de aquellos que son más saludables y nutritivos.

Elegir inteligentemente, más allá de los colores

Los especialistas en nutrición indican que el NutriScore es una ayuda en la toma de decisiones, pero se debe usar inteligentemente. Por ejemplo, unos cereales ricos en fibra pero con un alto contenido en azúcar podrían quedar en tierra de nadie, en la zona amarilla, por lo que es importante elegir de manera consciente y no dejarse llevar únicamente por los colores del semáforo nutricional.

También alertan de que es un error comparar alimentos diferentes entre sí que desempeñan funciones distintas en nuestra dieta cotidiana. Por tanto, el semáforo nutricional se debe utilizar para elegir las opciones más saludables en una misma categoría de alimentos, sobre todo en aquellos más procesados.