Las seis causas más frecuentes de los vómitos en los perros
Los vómitos son una de las causas de visita al veterinario más frecuentes. Descubre los principales motivos por los que tu mascota puede vomitar.
Los problemas digestivos son una de las causas de visita al veterinario más frecuentes, en especial los vómitos. De hecho, los vómitos pueden ser un síntoma de diferentes problemas, desde una simple indigestión hasta enfermedades más graves. Además, una gastroenteritis sin tratar puede tener consecuencias mortales para tu mascota. Por eso, si los vómitos son agudos o crónicos, es importante que acudas al veterinario para que detecte su causa y te indique el tratamiento más adecuado.
¿Por qué suelen vomitar los perros?
- Cambios en la dieta
La flora bacteriana de los perros no es tan heterogénea como la de las personas, de manera que los cambios en la dieta pueden desequilibrarla y causar vómitos. Por esa razón, siempre se recomienda introducir los nuevos alimentos de manera gradual. Los alimentos ricos en grasas también suelen provocar problemas estomacales en los canes, así como haber comido algo en malas condiciones.
- Intolerancia alimentaria
En ocasiones los vómitos no se deben a un cambio de alimentación sino a una intolerancia alimentaria, la cual también cursa con diarreas y gases. Se trata de una reacción a alguno de los componentes del alimento, que tu mascota no puede metabolizar correctamente. Este problema es común con los productos lácteos ya que los perros carecen de la enzima para digerir la lactosa.
- Indigestión
Si tu mascota vomita poco después de comer, es probable que se deba a una indigestión. Este problema es más común cuando consume un pienso de baja calidad o si le das tu comida. El chocolate, las carnes grasas como la del cordero y los mariscos, por ejemplo, pueden provocar indigestión en los canes. También puede deberse a que coma demasiado o rápidamente, un hábito común en los perros nerviosos. Si se trata de una indigestión, es probable que veas a tu mascota encorvarse para aliviar las molestias estomacales.
- Obstrucción del tracto digestivo
En ocasiones los vómitos se deben a una obstrucción. De hecho, puede ser que tu mascota tenga arcadas, pero no llegue a vomitar. Las obstrucciones se producen cuando los perros tragan algún objeto, desde un trozo de juguete hasta una piedra o un hueso, que se ha quedado alojado en el estómago o en el intestino. En esos casos, el vómito es un acto reflejo para intentar expulsarlo.
- Parásitos intestinales
Si no desparasitas a tu mascota siguiendo las pautas que te ha indicado el veterinario, es posible que sus vómitos se deban a parásitos internos. Algunos gusanos intestinales, como las giardias y los ancylostomas, causan problemas gastrointestinales que pueden llegar a deteriorar bastante la salud de tu mascota.
- Enfermedades
Los vómitos también son un signo común de diferentes enfermedades. El parvovirus, la leptospirosis, la hepatitis o el moquillo suelen provocar problemas gastrointestinales. La insuficiencia renal, las neoplasias gástricas, la pancreatitis aguda, la piómetra, la inflamación hepática o la cetoacidosis diabética también suelen cursar con vómitos, siendo muchas veces el primer síntoma que aparece.