El aroma del interior del coche afecta tu forma de conducir
El olfato es uno de los sentidos más poderosos que tenemos, si bien normalmente no le damos demasiada importancia. Numerosas investigaciones realizadas en el campo de la Neuropsicología han demostrado que los aromas son unos de los estímulos más intensos a los cuales estamos sometidos y que nos pueden provocar recuerdos particularmente vívidos, mucho más de los que incita cualquier imagen o sonido.
Los aromas “le hablan” directamente a nuestras emociones ya que están conectados con la amígdala. Por una parte, esto nos permite revivir experiencias pasadas con mayor intensidad pero, por otra parte, también afecta nuestro estado emocional y, por ende, nuestro desempeño. Por eso no es descabellado pensar que el olor puede afectar nuestra forma de conducir.
La influencia de los buenos y malos olores
La Fundación RAC de Gran Bretaña desarrolló un curioso experimento en el cual relacionó los olores y la forma de conducir. Los resultados obtenidos sorprendieron incluso a los propios investigadores ya que pudieron comprobar que los olores no solo inciden en el estado de ánimo del conductor sino también en sus acciones al volante.
En práctica, los olores adecuados pueden ayudar al conductor a distinguir con mayor rapidez los peligros que se encuentran en la carretera y a mantenerse concentrado al volante, lo cual minimiza el riesgo de sufrir un accidente.
Sin embargo, los olores desagradables o inadecuados no son muy seguros para la conducción. En el experimento se apreció que estos provocaban un aumento de la velocidad, promovían el sueño e incluso empeoraban el humor haciendo que el conductor se sintiese molesto e irritable. Obviamente, todo esto contribuye a aumentar las probabilidades de sufrir un accidente.
Los peores olores para conducir
Los investigadores realizaron una lista de los aromas que deberíamos evitar cuando estamos al volante, al menos si queremos sentirnos más seguros. Algunos de ellos son:
- Manzanilla, jazmín y lavanda, puesto que inducen un estado de relajación muy cercano al sueño.
- El aroma del pan fresco, la bollería y la comida rápida, ya que provocan irritabilidad en el conductor y, como resultado, este suele sobrepasar los límites de velocidad.
- Olor a hierba recién cortada y a pino, los aromas del bosque generalmente nos hacen evocar experiencias agradables del pasado que nos sumen en un estado de ensoñación. Por ende, disminuye nuestra atención en la carretera.
- Olor de cuero y aceite, casi siempre este aroma le recuerda a los conductores su primer coche y les incita a adoptar comportamientos más temerarios al volante, en un intento de revivir los tiempos de la juventud.
Los mejores aromas
Si quieres mejorar tu estilo de conducción, sentirte más seguro y evitar los accidentes, he aquí los aromas que te ayudarán a lograr tus objetivos:
- Hierbabuena y canela, puesto que mejoran la concentración y disminuyen la irritabilidad.
- Limón y café, dos aromas que no solo favorecen una mayor concentración sino que también despejan la mente y permiten focalizarse en los detalles de la carretera.
- La combinación del olor de los productos de limpieza y los disolventes orgánicos, se ha demostrado que estos aromas no solo aumentan nuestro nivel de atención sino que nos hacen conducir de manera más cauta.
- Olor a mar, de seguro no hay nada como la brisa marina para incitar la respiración profunda que, a su vez, nos ayuda a eliminar el estrés, relajar los músculos y limpiar la mente.
Fuente: (2005, Junio) Odours ‘affect driving ability’. En: BBC.