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Jul 2014 

¿Cómo saber si estás correctamente hidratado?

Durante el verano, cuando las temperaturas aumentan, perdemos mucho líquido y la deshidratación nos acecha. Desgraciadamente, no siempre nos damos cuenta a tiempo de que necesitamos hidratarnos. De hecho, es curioso que aunque seamos conscientes de la importancia de la hidratación, el 70% de las personas no llega a beber dos litros de agua al día.

Los signos que indican que no estás bien hidratado

El agua es fundamental para la mayoría de nuestros procesos fisiológicos, desde la digestión hasta el transporte de nutrientes, la regulación de la temperatura corporal y la eliminación de los desechos. Cuando no reponemos los líquidos que hemos perdido, nuestro cuerpo se ve obligado a recurrir al agua que se encuentra dentro de las células pero se trata de una solución a corto plazo que podría desencadenar consecuencias severas. De hecho, la deshidratación grave puede llegar a provocar desde convulsiones hasta daño cerebral permanente.

Como es mejor prevenir que lamentar, si las temperaturas son muy altas, sudas copiosamente, sabes que vas a estar expuesto al sol durante mucho tiempo o vas a realizar un gran esfuerzo físico, deberías mantenerte atento a las señales que envía tu cuerpo.

Algunos de los signos más usuales de la deshidratación leve son:

–       Boca seca o pegajosa

–       Orina de color demasiado oscuro

–       Dolor de cabeza y/o vértigo

–       Sensación de cansancio y debilidad

–       Calambres musculares

¿Cuánta agua necesitas?

Como norma, necesitamos beber dos litros de agua al día pero esta cantidad es meramente orientativa ya que algunas personas, debido a su metabolismo o por el nivel de actividad que mantienen, necesitarán beber más o menos para mantenerse adecuadamente hidratadas. No obstante, la regla de oro que se aplica a todos los casos es que no debemos limitarnos a beber cuando tengamos sed, debemos crear el hábito de hidratarnos.

Considera además que para mantenernos hidratados no solo podemos recurrir al agua. El balance hídrico adecuado está compuesto por un 50% de agua, un 30% de otras bebidas y un 20% del agua que se encuentra en los alimentos.

Cinco consejos para que te mantengas hidratado

  • Comienza el día con un vaso de agua y una ración de frutas. A lo largo de la jornada, bebe al menos otros dos vasos de agua, fuera de las comidas y aunque no tengas sed.
  • Disminuye el consumo de bebidas con alcohol y cafeína porque estas actúan como diuréticos y te harán perder líquido.
  • Si vas a hacer deporte o alguna actividad que te demande un esfuerzo físico, no olvides tener a mano una botella de agua.
  • Apuesta por una dieta rica en frutas y verduras. La sandía, la lechuga, la piña, el tomate, la berenjena y la naranja son algunos de los alimentos con mayor contenido de agua.
  • Evita las comidas copiosas y los alimentos con mucha sal ya que estos fuerzan al organismo a utilizar más agua para poder metabolizarlos y, como resultado, estarás más expuesto a la deshidratación.