¿Cómo lograr que tu perro no te pida comida en la mesa?
¿Tu mascota te pide comida insistentemente cuando estás sentado a la mesa? Te explicamos cómo enseñarle a esperar pacientemente hasta que termines, con firmeza pero sin recurrir al castigo.
Si tienes un perro en casa, es probable que en alguna ocasión haya intentado pedirte comida mientras cenabas. Quizá te miraba con cara de pena, gemía o incluso intentaba llegar hasta tu plato para robarte un bocado. Este comportamiento, que en un primer momento puede resultar simpático, a la larga termina convirtiéndose en una situación incómoda, sobre todo cuando hay invitados a comer. Por eso debes educar a tu mascota lo antes posible.
Evita que el mal comportamiento se convierta en un hábito
Prevenir es mejor que curar. Si no le das comida al cachorro cuando te la pide, evitarás que ese comportamiento se convierta en un hábito. Si eres coherente con esa regla y no aplicas excepciones, tu mascota no esperará que le des comida cada vez que te sientes a la mesa.
Para aplicar esta regla, es importante llegar a un consenso familiar, de manera que ningún miembro de la familia se salte la norma. También es importante que los invitados lo sepan, de manera que no le den de comer a tu mascota mientras están sentados a la mesa.
¿Qué puedes hacer si ha fallado la prevención?
Si tu mascota tiene hambre, es comprensible que te pida comida. Un perro saciado no suele tener la necesidad de pedir más comida y podrás controlarlo mejor. Eso significa que una estrategia para reducir las posibilidades de que te pida comida cuando te sientas a la mesa es permitir que coma antes.
Si tu mascota te sigue pidiendo comida insistentemente, debes hacerle entender que solo si se queda tranquila podrá conseguir lo que desea. Debe comprender que no lo logrará acercándose a la mesa. Lo ideal es que coloques su colchón o una mantita relativamente cerca de la mesa y le pidas que se tumbe.
Cuanto tu mascota se acerque a la mesa, indícale que se tumbe en ese lugar. Cuando lo haga, puedes darle un trocito de comida. Si se levanta y se vuelve a acercar a la mesa, debes pedirle que regrese a tumbarse, pero esta vez no le premies con comida. Si repites este ejercicio con mucha paciencia y cariño, tu mascota entenderá que solo podrá conseguir comida si espera tranquilamente.
Luego solo tendrás que lograr que tu mascota permanezca cada vez más tiempo sin acercarse a la mesa. Cuando se mantenga tranquila en el lugar que le has indicado, puedes llevarle otro premio, de manera que vayas alargando paulatinamente el tiempo de espera, hasta que termines de comer. También puedes ir distanciando la mantita o su colchón de la mesa.
Lo más importante es que nunca le des comida directamente cuando esté parado a tu lado en la mesa, ya que así solo refuerzas ese comportamiento. Siguiendo estos pasos y sin tener que recurrir al castigo, en cuestión de días o semanas tu mascota aprenderá a esperar pacientemente y es probable que termine perdiendo el interés por pedirte comida a la hora de cenar.