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Feb 2020 

¿Cómo Instagram puede afectar tu salud mental?

Instagram es una de las redes sociales más populares entre los jóvenes, pero también puede ser peligrosa para su salud mental, sobre todo si pasan demasiado tiempo conectados.

Instagram cuenta con mil millones de usuarios activos de todo el mundo. La red social que permite compartir y editar fotos y vídeos se ha convertido en una de las más populares, sobre todo entre los más jóvenes. Sin embargo, el mundo de Instagram no es tan perfecto como se ve en sus fotos. También ha sido catalogada como “la red social más dañina para la salud mental de los jóvenes”, según un estudio realizado por la Universidad de Cambridge.

Aumento de la ansiedad y la depresión

El estudio realizado en colaboración con la Royal Society for Public Health analizó a 1 500 jóvenes de entre 14 y 24 años. Los investigadores estudiaron diferentes variables relacionadas con la salud mental y el bienestar, como la calidad de sueño, la imagen corporal, el apoyo emocional, la ansiedad y la depresión o las relaciones con las personas en el mundo real.

Descubrieron que es probable que uno de cada seis jóvenes sufra un trastorno de ansiedad debido al uso intensivo de las redes sociales, sobre todo aquellos que pasan horas conectados a ellas. También es posible que algunos de esos jóvenes desarrollen depresión debido a los sentimientos de angustia y frustración que experimentan al compararse con las vidas aparentemente mejores y más felices que se suelen mostrar en la red social.

Descontento con la imagen corporal

Instagram también suele generar sentimientos de inadecuación. El estudio reveló que 9 de cada 10 adolescentes reconocen sentirse descontentos con su cuerpo, lo cual se debe fundamentalmente a que no cumplen con los criterios estéticos que se suelen promover en Instagram. De hecho, otro estudio realizado en la Universidad York, en Canadá, reveló que las mujeres, tras interactuar en las redes sociales con otras personas que perciben como más atractivas, luego se sienten más insatisfechas con sus cuerpos.

Esa sensación de ser inferior o insuficiente puede generar comportamientos dañinos, aumentando la propensión a sufrir trastornos alimentarios como la anorexia o la bulimia. También ha conducido a un aumento de la demanda de cirugía estética, un fenómeno cada vez más habitual entre los jóvenes que se sustenta en la búsqueda del perfeccionismo.

Daños a la autoestima

Instagram no solo encierra el peligro de las comparaciones, sino que para muchos jóvenes también se ha convertido en una especie de medidor del éxito social. Cuando su autoestima depende de la cantidad de seguidores, el número de “me gusta” o los comentarios que han generado sus fotos o vídeos, estos jóvenes comienzan a vivir en una montaña rusa emocional en la que su estado de ánimo depende del éxito de sus publicaciones.

Es más probable que esos jóvenes no desarrollen una autoestima sólida, sino que midan su valía por factores externos y que dependan cada vez más de la validación y la aceptación de los demás. Esa dependencia termina dejándolos vulnerables psicológicamente al acoso.

¿Cuál es la solución?

La mayoría de los psicólogos coinciden en que el problema no son las redes sociales sino el uso intensivo que se hace de las mismas, por lo que recomiendan reducir el tiempo que pasamos en Instagram. De hecho, un estudio realizado en la Universidad de Pensilvania comprobó que limitar el uso de las redes sociales a 30 minutos al día generaba una mejoría notable en el estado de ánimo tras tres semanas. Los jóvenes que participaron en este estudio reportaron sentirse menos solos, disminuyeron sus síntomas depresivos y experimentaban menos ansiedad.