¿Cómo evitar el agotamiento al conducir?
A lo largo de este verano la Dirección General de Tráfico prevé que se produzcan un total de 79 millones de desplazamientos por las carreteras. El año pasado esta temporada cerró con un descenso de la siniestralidad de un 10% pero aún así, 235 personas perdieron la vida. Como la fatiga y el sueño al volante fueron unas de las principales causas de accidente, si pretendes recorrer muchos kilómetros será mejor que tomes algunas medidas de precaución.
Cinco consejos para prevenir la fatiga al volante
Algunas personas piensan que conducir es una actividad que demanda muy poco esfuerzo pero lo cierto es que se trata de una tarea desgastante, tanto en el plano mental como físico ya que la necesidad de mantenerse concentrado permanentemente en la carretera provoca mucha tensión y genera agotamiento. Por eso es tan importante reponer energías durante el viaje y evitar los hábitos que pueden exacerbar el cansancio.
- Elige una ropa cómoda. Si vas a conducir durante horas, una ropa y un calzado cómodos serán tus mejores aliados, sobre todo en verano. Cerciórate de que llevas un atuendo ligero que te permita moverte con soltura y unos zapatos flexibles. Recuerda que la ropa demasiado ajustada puede obligarte a mantener los músculos en tensión, lo cual te exigirá un mayor esfuerzo al volante.
- Come y mantente hidratado durante el viaje. Es tan malo pecar por exceso como por defecto. Una cena copiosa hará que la digestión sea más lenta, provocará somnolencia y afectará tus reflejos pero si debes conducir durante varias horas, es recomendable que hagas un alto para reponer fuerzas. Apuesta por alimentos de fácil digestión, como las frutas, las verduras y las carnes magras. No olvides beber, preferentemente agua o zumos naturales.
- Haz pausas cada dos horas. A fuerza de mantener la misma posición durante mucho tiempo, tus músculos comenzarán a engarrotarse y tu atención disminuirá por efecto de la monotonía. Por tanto, se recomienda que te detengas aproximadamente cada dos horas, aprovecha este momento para salir del coche, tomar aire fresco y realizar algunos ejercicios de estiramiento básicos.
- Evita conducir de noche y cuando hay mucho calor. Durante la noche el tráfico en las carreteras es menor pero aumentan las probabilidades de sufrir un accidente ya que somos más propensos a quedarnos dormidos. Algo similar ocurre durante las horas del mediodía, sobre todo cuando hay mucho calor. Por eso, siempre que puedas, evita conducir durante las horas en las que normalmente duermes y, si tienes que hacerlo, asegúrate de haber descansado antes.
- Adopta una postura adecuada al volante. Si mantienes una postura correcta al volante, podrás reaccionar más rápido ante un estímulo imprevisto. Además, una mala postura no solo dificultará tu capacidad de maniobra sino que te agotará más rápido. Recuerda que las piernas y brazos deben estar semi-flexionados, la espalda debe estar en contacto con el respaldo, lo más recta posible, y debes tener un buen soporte para la zona lumbar para que no vayas deslizándote por el asiento.
