¿Cómo cuidar a tu mascota en verano?

Cuando llega el verano, tu mascota se expone a nuevos riesgos. Te damos 5 consejos para que la mantengas bien hidratada y protegida durante esta época del año.

Cuando llega el verano y las temperaturas suben, las mascotas suelen pasar más tiempo al aire libre, lo cual representa nuevos riesgos. Además de exponerse a insectos y parásitos que pueden transmitirles enfermedades como la leishmaniosis, también son más propensos a sufrir un golpe de calor ya que perros y gatos no cuentan con un mecanismo de regulación de la temperatura corporal tan eficiente como el nuestro. Por eso es importante extremar las precauciones en esta época del año.

Cinco consejos para que tu mascota esté segura en verano

1. Que nunca le falte agua fresca. Asegúrate de que tu mascota siempre tiene a su disposición agua fresca. Un pequeño truco para que se mantenga fría consiste en colocar cubitos de hielo en el agua. Si tu mascota no suele beber mucho, un pequeño truco para animarla a hidratarse consiste en colocar diferentes bebederos por toda la casa. Y si salís a dar un paseo, no olvides llevar un bebedero portátil. Otra alternativa para mantener a tu mascota bien hidratada consiste en incluir más alimentos húmedos en su dieta ya que algunos contienen más de un 70% de agua.
2. Que descanse en un sitio ventilado y a la sombra. Es conveniente que coloques la cama de tu mascota en una zona fresca de la casa, preferentemente cerca de una ligera corriente de aire, de manera que pueda dormir sin calor. Recuerda que una cama demasiado caliente, como la que probablemente usa en invierno, no es ideal para el verano. Apuesta por una cama levantada del suelo, de material transpirable o usa una esterilla refrigerante.
3. Pulveriza agua sobre el pelo. En verano puedes bañar a tu mascota más a menudo para que se mantenga más fresca. Cuando aumenten mucho las temperaturas, puedes pulverizar un poco de agua sobre el pelo, una cantidad suficiente como para disminuir la temperatura de la piel sin que gotee demasiado. Si tu mascota tiene el pelo corto, será suficiente con pasarle una toalla humedecida. Si lo haces antes de salir de paseo, tu mascota disfrutará mucho más ya que estará más fresca.
4. Protégele de los parásitos e insectos. El calor no es el único enemigo en verano. Dado que las mascotas suelen pasar más tiempo al aire libre, también están más expuestas a los parásitos e insectos, por lo que es importante que la desparasites y protejas en esta época. Puedes recurrir a las pipetas, un collar antipulgas o incluso un aerosol insecticida para mantener alejados a los insectos que pueden transmitirles enfermedades graves como la leishmaniosis y la filariosis.
5. Modera el nivel de actividad física. Siempre que sea posible, deja libre a tu mascota para que sea ella misma quien regule el nivel de actividad según su estado físico. Intenta que no realice actividad física intensa durante las horas de más calor, planifica los paseos durante las primeras y últimas horas del día. Y no olvides que los cachorros, animales ancianos y las razas braquicéfalas son los más vulnerables al calor, por lo que debes extremar las precauciones.