genesis
Dic 2014 

Cinco consejos para mantener los neumáticos en perfecto estado

El mantenimiento de los neumáticos del coche se ha convertido en la gran asignatura pendiente de un gran número de conductores. A raíz de la crisis muchos españoles han descuidado el mantenimiento de las ruedas, saltan las revisiones y apuestan cada vez más por los neumáticos de segunda mano, malos hábitos que aumentan el riesgo de sufrir un accidente. De hecho, debes tener en cuenta que los neumáticos son el único punto de contacto del coche con la carretera por lo que es fundamental que estén en buen estado.

¿Cómo alargar la vida útil de los neumáticos?

Los neumáticos tienen una fecha de caducidad, después de la cual la goma pierde agarre y tiende a agrietarse. No obstante, en la mayoría de los casos se deben cambiar antes de llegar a este punto, ya sea porque se han recorrido muchos kilómetros o debido a que no se han cuidado lo suficiente. ¿Qué hacer para alargar su vida útil y no comprometer la seguridad en la carretera?

  1. Mantén la presión de aire adecuada. Los cuatro neumáticos siempre deben tener la presión recomendada por el fabricante, que debe variar según la carga del coche. De esta forma evitarás que se desgasten de manera irregular y, a la misma vez, podrás ahorrar combustible. No olvides que si circulas con poca presión, un cambio rápido de trayectoria o una curva demasiado cerrada pueden hacerte perder el control del coche.
  2. Conduce con precaución para no golpear los neumáticos. Tomar un resalto o un bache a gran velocidad no solo puede dañar la dirección del coche sino también los neumáticos. Cuando se produce un gran impacto puede aparecer un abultamiento en el flanco, lo cual indica que los cordones de la carcasa se han roto y, por consiguiente, que existen grandes probabilidades de que ocurra un reventón en plena marcha.
  3. Ten a punto la suspensión y la dirección. Cuando el neumático no gira de forma paralela al sentido de la marcha sino que tiene cierta inclinación, se desgasta por un solo lado, lo cual puede provocar efectos negativos en la conducción. Recuerda además que cada vez que cambies o desmontes los neumáticos, estos deben ser equilibrados, así prevendrás el desgaste prematuro y eliminarás las vibraciones.
  4. Revisa el estado de las válvulas y los tapones. Pocas personas se preocupan por este detalle pero no debes olvidar que las válvulas y los tapones suelen ser de goma y también se deterioran. De hecho, cuando el coche circula a gran velocidad la válvula suele doblarse por la fuerza centrífuga y se deteriora con mayor rapidez. Su tapón también es fundamental ya que protege al neumático del polvo y la suciedad, además de mantener la estanqueidad y la presión.
  5. Guárdalos en un lugar adecuado. Si cambias cada año los neumáticos para colocar unos de invierno, asegúrate de guardar los otros en una zona ventilada y seca, alejados de la lluvia y el sol. Lo ideal es colocarlos sobre una tarima plana de madera, sin llantas y en posición vertical, girándolos cada cierto tiempo.