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Oct 2021 

Aprende a evitar las malas posturas en moto

Si pasas muchas horas en la moto, las malas posturas terminarán pasándote factura. Descubre cuál es la postura más ergonómica para evitar lesiones.

La moto es un medio de transporte ágil, rápido y económico que no solo sirve para evitar los atascos, sino que también es más fácil de aparcar en las grandes ciudades. Sin embargo, también son más incómodas que un coche cuando se trata de trayectos más largos, de manera que si no mantienes una postura adecuada puedes terminar sufriendo desde lumbago hasta cervicalgia, tendinitis o incluso túnel carpiano.

Las lesiones no las causa la moto, sino las malas posturas

Ir en moto no es una actividad particularmente exigente para tus articulaciones y músculos. El problema comienza cuando adoptas posturas poco ergonómicas un día tras otro, con pocas variaciones y durante mucho tiempo.

En esos casos, tu cuerpo va acumulando microtraumatismos que van cargando los músculos, articulaciones y tendones hasta llegar a afectar la mecánica corporal y causar lesiones. Por eso, no es inusual que muchos motoristas tengan nervios pinzados, contracturas musculares y algias vertebrales.

El dolor en los hombros y las molestias en la zona lumbar son las dos quejas más comunes de las personas que usan la moto con frecuencia. El dolor al nivel de cadera y la limitación de la funcionalidad de la articulación de la rodilla son otros problemas usuales causados por una mala postura en la moto, así como las molestias en las cervicales y la sensación de hormigueo y adormecimiento en las muñecas, codos y dedos.

¿Cuál es la postura adecuada para ir en moto?

Para ir en moto necesitas adoptar una postura natural y relajada que te permita controlar el vehículo sin ejercer una fuerza constante que tense tus músculos, sobre todo en los trayectos largos. De esta manera no solo evitarás lesiones a largo plazo, sino que te agotarás menos en los viajes.

En los tramos rectos, es importante que mantengas el tronco lo más recto posible, aunque con los riñones un poco adelantados para evitar la cifosis. Mantén la cabeza en posición vertical con el tronco y perpendicular al suelo, ligeramente levantada.

Los brazos deben estar relajados y los codos ligeramente flexionados, pero sin abrirse demasiado hacia afuera. Coloca las manos de manera relajada en el centro de cada puño. El dedo índice y corazón deben estar apoyados sobre las maneras de freno y el embrague, mientras el pulgar y el resto de dedos descansan en la dirección. Así tendrás un mayor control si necesitas realizar una frenada de emergencia.

Intenta sentarte lo más cerca posible del tanque de combustible y aprieta la moto ligeramente con los muslos. Apoya el metatarso de los pies sobre el reposapiés o la estribera de la moto, en una posición horizontal al suelo. Mantén los dedos de los pies orientados hacia adelante e intenta accionar los pedales desde el tobillo, de manera que prácticamente no levantes el pie del soporte. Así ganarás en precisión y agilidad en las maniobras, sin necesidad de corregir la trayectoria constantemente.