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Dic 2014 

Alquilar un piso: Cinco errores de principiante que se pagan caro

A raíz de la crisis cada vez más personas apuestan por el alquiler. De hecho, el 40% de los españoles reconoce que alquila una vivienda porque tiene dificultades para encontrar financiación. Sin embargo, la crisis también ha puesto de relieve las ventajas del alquiler, el 38% de las personas reconocen que esta opción les brinda más libertad, sobre todo a la hora de encontrar trabajo, y un 17% afirma que les permite ahorrar los gastos del mantenimiento, que suelen correr a cargo del propietario.

Sin embargo, encontrar el piso adecuado, al precio conveniente y en el lugar que deseamos no siempre es una tarea tan fácil como la pintan en los anuncios de los portales inmobiliarios. En la realidad las cosas son un poco más complicadas y los errores de principiante se suelen pagar muy caros.

Despistes imperdonable al alquilar un piso

  • Alquilar un piso que no puedes pagar. A primera vista puede parecer un error imposible de cometer pero lo cierto es que algunas personas se enamoran de la vivienda y deciden alquilarla, con la esperanza de que luego encontrarán a un compañero de piso con el cual compartir los gastos. Sin embargo, la regla general para alquilar un piso consiste en no gastar más del 35% de lo que ganas. Si el alquiler es muy caro y pretendes compartir piso, asegúrate de encontrar primero a la persona adecuada y, solo después, firma el contrato.
  • Pagar una fianza excesiva. En los tiempos que corren, es comprensible que muchos propietarios tengan recelos a la hora de alquilar sus viviendas pero eso no les da derecho a pedir una fianza excesiva. La ley de Arrendamientos Urbanos de 1994 establece que “a la celebración del contrato, será obligatoria la exigencia y prestación de fianza en metálico en cantidad equivalente a una mensualidad de renta en el arrendamiento de viviendas”. No obstante, en la actualidad muchos propietarios demandan tres meses, una fianza mayor sería un despropósito así que te resultará más conveniente buscar otro piso. No olvides exigir un recibo debidamente firmado y fechado.
  • No tener contrato ni inventario. Alquilar un piso sin tener un contrato significa quedar a merced del propietario, sin tener derecho legal alguno. Por eso, se recomienda que firmes el contrato desde el primer día y, de paso, que incluyas un inventario, firmado en cada una de sus hojas. Así, cuando te vayas del piso, el casero no te podrá reclamar injustamente. Además, recuerda que un contrato legal es muy importante porque cuando se trata de la primera vivienda, puedes desgravar el alquiler de la declaración del IRPF.
  • Pagar más de lo que estipula el contrato. Quienes alquilan un piso por primera vez no suelen estar al tanto de las leyes de arrendamiento pero lo usual es que los impuestos sobre la vivienda y las comisiones las pague el propietario. A menos que en el contrato se indique lo contrario, no te corresponde pagar el IBI ni la tasa de basuras. De ahí la importancia de leer atentamente la letra pequeña del contrato antes de firmar.
  • Pagar todo lo que se rompe. Como regla general, cuando se vive en un piso de alquiler, las averías que no han sido responsabilidad del inquilino, como puede ser la rotura de la lavadora o la caldera, corren a cargo del propietario. Si decides correr con estos gastos, debes pedir que te los descuenten de la cuota de alquiler, para lo cual es imprescindible que conserves las facturas ya que estas serán el comprobante legal de la cantidad que has desembolsado.

 

Fuentes:
(2014, Mayo) La crisis consolida el alquiler y descubre sus ventajas. En: 20 Minutos.(1994) Ley 29/1994, de 24 de noviembre, de Arrendamientos Urbanos. En: BOE.