La seguridad: Un factor esencial para abrir un alojamiento rural
El turismo siempre ha sido un sector fundamental de la economía española. Y no es para menos porque las temperaturas generosas de la península ibérica permiten disfrutar de sus bellísimos paisajes y sus tradiciones más autóctonas. Sin embargo, en los últimos años una nueva forma de turismo está comenzando a ganar espacio: el turismo rural.
Ya sea porque las personas buscan experiencias más auténticas en contacto con la naturaleza y la cultura local o porque la crisis económica ha obligado a muchos a crearse su propio empleo, lo cierto es que no son pocas las familias que tienen a su disposición casas de campo que podrían convertirse en un alojamiento rural. Obviamente, esta decisión conlleva varios cambios, sobre todo en lo que respecta al seguro de hogar.
Los requisitos básicos de seguridad
Más allá de la belleza del paisaje y del tamaño de la casa, la primera condición que debe cumplir un alojamiento rural es la de garantizar la seguridad de sus huéspedes. Cada provincia tiene su propio Patronato del Turismo que establece cuáles son las leyes y las normas a seguir. Por ejemplo, el tema de la seguridad infantil es esencial y por eso se pide que los parques infantiles sean homologados, que las piscinas estén debidamente valladas y que todos los enchufes de la casa cuenten con su protección.
La prevención contra incendios también desempeña un gran papel en las cuestiones de seguridad por lo que se exige que exista al menos un extintor en cada planta. Este se deberá colocar en un área común, de fácil acceso y en un sitio bien visible. En algunos casos, sobre todo cuando la casa se encuentra en un lugar aislado, se exige la ubicación de un pararrayos y un grupo generador de energía para que el hotel pueda autoabastecerse en caso de fallos en el suministro de corriente eléctrica.
Además, los propietarios deberán informarle a sus huéspedes los posibles peligros que alberga la zona, como la presencia de pozos, barrancos o animales peligrosos. También es obligatorio ubicar en un sitio visible los teléfonos básicos de emergencia así como el teléfono de contacto de la persona responsable de la casa.
¿Qué características debe tener una póliza de seguro para un alojamiento rural?
Una vez que se ha obtenido la autorización para abrir el alojamiento rural, será necesario contratar un seguro de hogar adecuado para esta actividad. En este caso debes asegurarte de que la póliza cubra la responsabilidad civil frente a terceros ya que algún cliente podría demandarte por daños, omisiones o negligencia vinculados al equipaje, el uso de los electrodomésticos, las actividades al aire libre… en fin, la lista de percances podría ser interminable.
Este seguro de hogar también debería proteger el alojamiento de los siniestros, las averías, los robos o las catástrofes naturales. Piensa que no solo se trata solo de tu casa sino también de tu fuente de rédito. Por ende, es vital que cualquier daño sea reparado en el menor tiempo posible. Finalmente, sería ideal que este seguro de hogar incluyese una indemnización por cierre de la actividad o por incapacidad laboral.
