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Mar 2014 

La moto en invierno: ¿Cómo protegerse del frío?

Los apasionados de las motos saben que uno de sus principales puntos débiles son las inclemencias del tiempo. Cuando hay mucho frío o comienza a llover, lo que era un recorrido agradable se puede convertir en una verdadera pesadilla. Como sabemos que a raíz de la crisis cada vez más personas están apostando por las motos como su principal medio de transporte para moverse por la ciudad, nuestra compañía de seguros quiere ofrecerte algunas recomendaciones para que puedas protegerte del frío y llegar sano y salvo a tu destino final.

Consejos para conducir una moto de manera segura y protegido del frío

Es importante que seas consciente de que una exposición prolongada al frío puede entorpecer tus sentidos causando insensibilidad en las extremidades, lo cual incrementa las probabilidades de que pierdas el control de la moto. Con los sentidos embotados, no solo te demorarás más en responder ante los estímulos de la carretera sino que incluso puedes pasar algunos por alto por lo que conducir en estas condiciones no es seguro.

Por tanto, el primer consejo para conducir una moto en invierno es moderar la velocidad. En caso de que planifiques un viaje más largo, te recomendamos que hagas varias pausas a lo largo del camino para que puedas estirar las piernas y beber algo caliente que te permita recuperar la temperatura corporal.

Por supuesto, utilizar la ropa adecuada es fundamental. Lo ideal es que apuestes por un casco integral, que deberás llevar completamente cerrado para estar más seguro. Además, deberá contar con un sistema de ventilación adecuado que prevenga el empañamiento que se suele producir debido a la diferencia de temperatura entre el interior y el exterior.

Como la zona del cuello normalmente se queda muy expuesta, cuando hace mucho frío el casco no es suficiente. Te aconsejamos que uses un pasamontañas, mejor aún si se extiende hasta cubrir el área del pecho. En las tiendas especializadas podrás encontrar diferentes modelos de sotocascos térmicos.

Las manos son otras de las zonas más sensibles del cuerpo por lo que tendrás que apostar por guantes que sean resistentes pero que, a la misma vez, dejen transpirar la piel. Recuerda que también existen empuñaduras calientes que se instalan en el manillar de la moto y que te ayudarán a calentar las manos. Se trata de una inversión muy conveniente si vives en una zona donde los inviernos suelen ser muy fríos, al igual que el parabrisas o incluso puedes pensar en el carenado.

Por supuesto, también deberás hacerte de una buena chaqueta. En la actualidad fabrican varios modelos que son muy resistentes y mantienen el calor pero también son muy ligeros. Recuerda que para facilitar la circulación periférica, lo más seguro es usar varias capas de ropa que no te queden muy ajustadas.

Como colofón, no olvides protegerte las piernas usando los cubrepantalones. En la actualidad también venden plantillas térmicas que puedes colocar dentro de las botas y así estarás seguro de que mantendrás los pies calientes incluso en los días más fríos.