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Abr 2013 

Fumar en el hogar: Los peligros que conlleva

 

Que fumar es un hábito muy dañino para la salud ya es un hecho de conocimiento popular avalado por múltiples estudios científicos. Se conoce que las sustancias contenidas en el cigarrillo (que son unos 4000 productos, de los cuales se sabe que 250 son nocivos y más de 50 cancerígenos) pueden causar desde patologías respiratorias hasta enfermedades cardiovasculares. Sin embargo, el daño que el humo les provoca a las personas que comparten el mismo ambiente con el fumador son consecuencias sobre las cuales no se suele reflexionar.

Los riesgos de fumar en lugares cerrados

En primer lugar, debes saber que el hábito de fumar en lugares cerrados es mucho más dañino que si lo haces en sitios abiertos donde circula libremente el aire. Esto se debe al hecho de que, al no cambiar el aire, se continúa respirando el humo durante un periodo de tiempo más prolongado. Obviamente, este humo no solo afecta al fumador sino también a todas las personas que comparten la misma habitación.

Según un estudio realizado por investigadores del Departamento de Medicina de la Universidad de Minnesota, el 90% de los niños que conviven en hogares con fumadores y que están expuestos al humo pasivo presentan trazas de sustancias procedentes del tabaco en su orina.

El humo pasivo es particularmente dañino porque no está depurado por el filtro del cigarrillo y, en el caso de los niños, porque su aparato respiratorio es más vulnerable a las sustancias nocivas que contiene el cigarrillo. Tanto es así que estas sustancias pueden penetrar en profundidad en las células y afectar de forma grave e irreversible su desarrollo.

Por estas razones, es imprescindible que las personas no fumen en locales cerrados y, sobre todo, en los hogares donde hay niños pequeños. En el caso de que no se pueda abandonar el hábito, siempre se recomienda fumar con las ventanas abiertas para cambiar el aire.

Prevenir los incendios en el hogar

Además de los daños a la salud, otro de los problemas que causa el cigarrillo son los incendios. De hecho, una buena parte de los fuegos son causados por las colillas de cigarros. Según estadísticas publicadas en el diario El País, se conoce que los incendios causados por cigarrillos sin apagar ascienden a 30.000 al año, con un balance de 1.000 muertos y 4.000 heridos. Obviamente, no se trata solo de incendios en los hogares pero de todas maneras esta cifra es un buen punto de partida sobre el cual reflexionar.

Tanto es así que el año pasado la Unión Europea aprobó una ley mediante la cual impone que los cigarrillos tengan un sistema que les permita apagarse solos en el caso de ser abandonados. En práctica, estos cigarrillos deberán incluir dos tramos de papel de mayor grosor que son los encargados de detener la combustión. De esta forma se espera disminuir hasta en un 40% el número de muertes causadas por esta actitud negligente de algunos fumadores.

Por último, vale puntualizar que normalmente los seguros de hogar cubren los incendios pero en el caso de que se demuestre que ha sido causado por una colilla de cigarro encendida, la indemnización podría verse afectada puesto que se considera una negligencia. De la misma forma, para los fumadores los seguros de vida son más caros ya que la aseguradora se enfrenta a un riesgo mayor. Por ende, fumar no solo acarrea múltiples riesgos sino que también afecta el bolsillo.

Fuentes:
Moliné, V. (2011, Noviembre) La Unión Europea impone los cigarrillos que se apagan solos. En: El País.