Cómo mantener tu coche limpio gastando poco dinero

Después de la compra de la vivienda, el mayor desembolso que suelen hacer los españoles es la compra de un coche. De hecho, aproximadamente una quinta parte del dinero que entra en el hogar se destina a cubrir los gastos que representa el coche. Sin embargo, a raíz de la crisis convendría ahorrar en algunos frentes y el lavado del coche puede ser uno de ellos, pero sin comprometer su limpieza y conservación.

¿Lavado profesional o en casa?

A la hora de lavar el coche existen dos posibilidades: hacerlo en casa, por tu cuenta, o llevarlo a un taller de lavado de coches. Solemos pensar que la segunda opción es más cara pero lo cierto es que en los últimos años los precios han bajado mucho y en la actualidad es posible acceder a un lavado profesional, tanto del exterior como del interior del vehículo, por menos de 20 euros.

Si tan solo necesitas un lavado rápido y automático del exterior, en algunas localidades cuesta apenas dos o tres euros, una opción mucho más conveniente que lavar el coche en casa usando una manguera ya que, además del tiempo que empleas, consume bastante agua, al menos un centenar de litros.

No obstante, cerciórate de que en el lavado automático no se utilicen cepillos ya que estos pueden dañar la carrocería. Si te preocupa el medio ambiente, puedes apostar por un taller de lavado que recicle el agua o elegir el lavado en seco. Sin embargo, la opción más económica es lavar el coche a la vieja usanza, recurriendo a la esponja y el balde de agua.

Lavar el interior del coche a costo casi cero

Lavar el interior del coche es más complicado, sobre todo si quieres recurrir a los productos de limpieza profesionales ya que estos suelen ser costosos. Sin embargo, puedes utilizar algunos trucos caseros que te permitirán obtener un resultado excelente a costo cero. Por ejemplo, en el caso de las manchas sobre la tapicería, si es de café, puedes aplicar una mezcla de agua fría y limpiacristales. Si es una mancha de maquillaje, podrás eliminarla con el mismo detergente que usas para lavar la ropa. Se trata de encontrar la fórmula adecuada para cada tipo de mancha.

También existen diferentes trucos para limpiar y mantener la tapicería. Si es de piel, puedes recurrir a algunos de los productos que tienes en casa, como la leche descremada, que es ideal para devolverle su brillo, o la crema hidratante corporal, que aplicada cada tres meses nutre la piel y evita que se resquebraje.

En el caso de las superficies de plástico, como las del salpicadero y las puertas, será mejor que compres un producto específico para darles brillo y devolverles su aspecto original. En las tiendas especializadas encontrarás desde productos limpiadores hasta rejuvenecedores, su precio suele ser asequible y como una sola aplicación puede durar varias semanas o incluso meses, un litro rendirá bastante.

Por último, no te queda sino limpiar los cristales, aspirar el suelo y lavar las alfombrillas.