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Oct 2014 

Cinco ideas para comprar de manera más ecológica

En los últimos años ha crecido mucho la conciencia medioambiental y cada vez nos preocupamos más por reducir nuestra huella ecológica. Sin embargo, no es suficiente con apostar por los alimentos ecológicos y disminuir nuestro consumo, existen otros hábitos que no solo nos permitirán ser más respetuosos con el medio ambiente sino también ahorrar.

¿Cómo conjugar la ecología y el ahorro?

  • Elige productos locales y de temporada. Todos los productos que provienen de lejos, sobre todo cuando no son de temporada, tienen un fuerte impacto medioambiental debido a que su transporte aumenta considerablemente el nivel de emisiones de CO2 a la atmósfera. Además, también son más costosos y generalmente tienen menos sabor pues no son tan frescos. Por eso, las compras ecológicas pasan por elegir productos del entorno propios de la temporada.
  • Apuesta por las bolsas reutilizables. Uno de los principales problemas medioambientales que enfrentamos en la actualidad es el manejo de los residuos de plástico. ¿Sabías que cada año unos 8.000 millones de bolsas de plástico terminan en la basura o en el mar y que estas tardan más de medio siglo en degradarse? Por eso, en vez de utilizar las clásicas bolsas de plástico, apuesta por las que se pueden utilizar varias veces o por las bolsas de papel, que aunque no se reciclen, se biodegradan en un periodo máximo de cinco meses.
  • Opta por los productos a granel o con envases mínimos. En la actualidad podemos encontrar diferentes formas de empaquetado, algunas son simplemente excesivas y solo sirven para producir una mayor cantidad de basura, casi siempre de plástico, que tarda cientos de años en descomponerse. Por eso, siempre que puedas, apuesta por los productos que se venden a granel.
  • Evita los productos de usar y tirar. La mayoría de los productos que se usan solo una vez y después se tiran, no solo aumentan de manera descomunal la cantidad de basura sino que también contribuyen a malgastar los recursos naturales. Por ejemplo, ¿sabías que un bebé usa una media de 5.400 pañales en sus 30 primeros meses de vida y que cada pañal tarda entre 300 y 400 años en descomponerse? Por eso, lo ideal es elegir productos que se puedan reutilizar o que al menos se puedan reciclar fácilmente.
  • Aprovechar el consumo colaborativo. En vez de comprar para tirar o almacenar, el consumo colaborativo insta a reutilizar y redistribuir. De esta forma no solo se ahorra dinero sino que también se consume de manera más sostenible. Existen sistemas basados en el producto a través de los cuales pagamos por el uso del mismo, sin adquirirlo, o mercados de distribución en los cuales podemos intercambiar productos que ya no necesitamos o venderlos. En España existen decenas de sitios web que permiten poner en práctica el consumo colaborativo, algunos de los más utilizados son Truekalo, Ropadona y Nolotiro, pero existen muchos más.
Fuentes:
(2014) Tendencia en el uso de las bolsas de plástico. En: Vida Sostenible.
Palicio, A. (2012) ¿Cuánto contaminan los pañales de los bebés? En: GEO.