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Ene 2013 

Aspectos a tener en cuenta a la hora de comprar una vivienda de segunda mano (II)

Los precios de las casas de segunda mano representan una oportunidad única para quien está pensando en comprarse una vivienda. Sin embargo, como detrás de muchas de estas casas se encuentran propietarios que enfrentan problemas económicos, antes de firmar el contrato de compraventa es importante que estés seguro de que todos los documentos están en regla.

Los documentos imprescindibles que debes comprobar

El primer paso antes de firmar un contrato de compraventa es acudir al Registro de la Propiedad y solicitar una Nota Simple. Se trata de un documento donde se resumen brevemente las características del inmueble, lo que más te interesa es la situación actual del inmueble. Revisa si existen cargas que puedan gravarlo, los derechos de usufructo y posibles embargos administrativos o judiciales.

El segundo paso es acercarse al Ayuntamiento y solicitar información sobre el pago del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), así como de los otros impuestos municipales que se apliquen en la zona. Siempre se recomienda solicitarle al dueño de la vivienda la copia del último recibo. Además, si la casa es muy antigua, es importante que preguntes si está incluida dentro de algún plan urbanístico especial que impida las labores de remodelación.

El tercer paso es dirigirse al presidente o administrador de la Comunidad de Propietarios y preguntar si todas las cuotas han sido pagadas, de lo contrario, la deuda recaerá sobre ti una vez que hayas comprado el inmueble.

Vale aclarar que en muchas ocasiones, cuando hay una agencia inmobiliaria de por medio, son ellos quienes se preocupan de buscar esta documentación y anexarla al contrato de compraventa. Así podrás estar seguro de que la casa está libre de deudas.

¿Qué sucede si la casa está hipotecada?

Si el piso tiene una hipoteca, lo más común es que el vendedor pague lo que le debe al banco en el momento en que recibe el dinero del comprador. Entonces la entidad bancaria emitirá, ante un notario, el documento correspondiente que indica que sobre la casa no pesa ninguna hipoteca.

Es muy importante que te cerciores de que el propietario anterior no ha dejado cuotas sin pagar de la hipoteca porque de ser así, el banco está en todo su derecho de embargar la misma, sin importar si esta ha cambiado de titular. También podrías asumir la hipoteca actual, descontando este importe del precio total de la vivienda. En ese caso, antes de firmar, debes estar 100% seguro de que comprendes todos los términos del contrato porque a partir de ese momento la responsabilidad será solo tuya.

Esta última es una opción muy interesante para quienes necesiten un préstamo puesto que de esa manera pueden ahorrarse el pago del Impuesto de Actos Jurídicos Documentados que, en un préstamo de 150.000 euros, supondría un ahorro de 3.000 euros.

Una vez que hayas comprado la casa, lo más aconsejable es contratar un seguro hogar, al menos durante el primer año puesto que nunca sabrás qué problemas puedes encontrar. Si te tomas un poco de tiempo puedes comparar seguros en Génesis, donde podrás encontrar pólizas multirriesgo muy convenientes y económicas.