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May 2014 

Lo que debes saber antes de comprar un coche de segunda mano

A raíz de la crisis, la venta de coches de segunda mano se ha disparado convirtiéndose en una opción muy interesante para aquellas personas que no pueden afrontar la compra de un coche nuevo. Sin embargo, aunque los precios han bajado mucho, es importante mantenerse atentos porque las “gangas” no siempre son lo que parecen y, al final, podrías terminar pagando mucho más de lo que tenías pensado.

Si encuentras un coche cuyo precio es demasiado bajo, es probable que en el fondo el propietario solo quiera deshacerse de él lo antes posible debido a que tiene alguna avería grave. Por tanto, como regla general, mientras más bajo sea el precio, más atención deberás prestar.

  1. Investiga la historia del coche. Puedes pedir los resultados de las ITV que ha pasado el coche o incluso solicitarle un informe a la compañía de seguros. Obviamente, mientras más incidencias encuentres, más probabilidades existen de que el coche termine en el taller por una avería importante.
  2. Prueba el coche. Lo ideal es que conduzcas acompañado de tu mecánico de confianza o de una persona que tenga experiencia en estas lides y sea capaz de detectar cualquier anomalía en el funcionamiento del coche. Te bastará dar una vuelta para comprobar el estado de los frenos, la caja de cambio, las suspensiones y la dirección.
  3. Revisa las luces. Todas las luces deben funcionar a la perfección y estar homologadas. Cerciórate además de que todos los testigos del salpicadero se encienden.
  4. Comprueba los niveles de líquidos. Échale un vistazo al refrigerante, el líquido de frenos y, por supuesto, el aceite del motor. Tendrás que fijarte en su viscosidad y color. Si los líquidos no están como deberían, esto puede indicarte que hay algún fallo en el coche o que el propietario no se ha preocupado mucho por el mantenimiento.
  5. Verifica el estado de los neumáticos. El estado de los neumáticos no solo es un indicador de cuántos kilómetros puede haber recorrido el coche sino que también puede desvelar un defecto. Por ejemplo, si notas un desgaste irregular o ves que los flancos están deformados, es probable que el coche tenga un problema en la dirección. El hecho de que estén muy desgastados o que se hayan vencidos será un indicador del cuidado que el propietario le ha prodigado al coche.

Recuerda además que cuando le compras el coche a un particular, esta transacción no está sujeta a la ley de garantías, a menos que se indique lo contrario en un contrato. Como regla general, tendrás seis meses para reclamar un “vicio oculto”; es decir, un defecto que te hayan ocultado. En ese caso, el propietario solo estará obligado a resarcirte la avería en cuestión.

El problema del cuentakilómetros

Según la RACC, entre el 5 y el 12% de los coches de segunda mano que hay en España tienen el cuentakilómetros manipulado. Con este “truco” algunos vendedores aumentan en una media de 8.000 euros el precio del vehículo.

Desgraciadamente, los cuentakilómetros digitales son relativamente fáciles de manipular por lo que si vas a comprar un coche de segunda mano, lo más conveniente es comprobar los kilómetros que tiene mediante la Dirección General de Tráfico. También existen algunas señales que desvelan el uso que se le ha dado al coche, como el estado de la tapicería, el desgaste en el volante o el estado del tubo de escape.

Fuente:
(Mayo, 2014) Entre el 5 y el 12% de los coches de segunda mano tienen el cuentakilómetros trucado. En: ABC.